lunes, 16 de noviembre de 2009

El paleto y el Alacrana

Hay paletos que, cuando llegan a la ciudad, creen que podrán ganarse un puesto en la sociedad soltando dinero. Y así le ocurrió a Zapatero. Cuando llegó a Madrid, al principio no tenía nada que hacer, o sea, continuó con su ocupación habitual. Pero cuando las bombas del 11M lo hicieron entrar en la alta sociedad, se creyó en la obligación de soltar dinero por todas partes. El problema de los paletos es que, como son ignorantes, le suelen dar el dinero a quien no lo necesita.

La crisis le vino como anillo al dedo para repartir millones de euros entre los ricos. Y también se las veía muy felices con los piratas somalíes. En el primer secuestro largó el dinero, y el barco secuestrado se vino para acá. En el segundo, en cambio, largó también el dinero, pero se presentó un problema. El pobre paleto no está para problemas. Él había cumplido. Pero aparecieron por aquí dos piratas negros, uno de ellos una inocente criatura, de clavícula elástica, y otro más malo que la quina, sin clavícula. Unos dicen que los trajo Garzón. Otros dicen que fue la Aído, que tenía unos penes de colores monísimos, que le iban a encantar a los piratas.

El caso es que el gobierno ha enloquecido. Todos dicen que están ¡trabajando! Pero lo terrorífico es que Moratinos dice que está llevando las negociaciones personalmente.

Mientras, a muchos españoles nos ha dado tiempo de pensar. Cosa que el paleto no se esperaba, porque no sabe de qué va eso de pensar. Y pensamos que el barco que apresaron los somalíes es de las islas Sheychelles. Pero pertenece a un país imaginario. Lo imaginó Sabino Arana en los largos ratos de ocio de los que disfrutaba en el manicomio. Allí diseñó un trapo lleno de tachaduras, como bandera del país de sus delirios. Este país, por cada euro que aporta a la economía nacional, se lleva ocho para sus chorradas. Una de ellas es haber matado a cientos de españoles. Y otra navegar en aguas internacionales bajo el trapo del loco.

La verdad, ¿vale la pena tener al pobre paleto preocupado, a los ministros teniendo que decir que trabajan, y a Moratinos diciendo que se ocupa de algo? A mí me parece que no. Es un barco extranjero, tripulado por extranjeros que nos chupan la sangre. Y quedan todavía muchos millonarios a los que largarles dinero.

3 comentarios:

  1. Lo de la bandera tiene tela. Es evidente que no navegaban bajo pabellón español. Unos dicen que era la ikurriña y otros que de las Seychelles. En realidad, los que alcanzaron a verla afirman que era una bandera de "muchos" colores. Y se quedan tan anchos.
    En fin, la de España sólo tiene dos, así que...

    Aquí se han unido el hambre con las ganas de comer. Por una parte, el Gobierno no da pie con bola y nada hace bien; en realidad, no sabe hacer nada más que disparates y no importa a quien ni con quien.
    Por otra, esos que despreciaban el pabellón español, ahora se lamentan de que España no les haya sacado aún las castañas del fuego. Sólo se consideran españoles cuando lo necesitan. Siempre es así.

    ¿Sabes que han dado permiso a un etarra en libertad condicional para ir a Francia a... ¡al podólogo! ¿Qué hacemos, reír o llorar? ¿O armarnos hasta los dientes?...
    ¡Por Thor!, que nunca un gobierno había sido tan rematadamente malo e inútil. Y además, ninguno ha contado con la inestimable ayuda de la "oposición" para que siga y siga muchos años.

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  2. Acabo de oir en es.radio, con pelos y señales, cómo lió la cosa del Alacrana el propio Zapatero en persona. Era lógico, no tiene ministros, tiene muñecos de ventrílocuo. Todo lo hace el Gran Califa de las Hijas Bellas.

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  3. Evidentemente, yo no he oído nada. Ni falta que me hace para saber que es el paleto del turbante el que lo lia todo porque se cree que todo lo sabe. Sus muñecos son muñecos, pero él es un horror.

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